la cara que amo es el secreto de mi cara
y mi cara está en ella como una máscara
cuyo peso ya no siento.
—JOÉ BOUSQUET
no eres tú lo que deseo en ti
soy yo,
mi propio deseo de desaparecer
en ti
y no ser más yo,
ser solo corriente eléctrica,
humedad escupida
fluctuación
en la profunda tristeza de ser
en mi soledad de estrella,
soy un corazón que palpita para nada,
un espejo sin rostro o
memoria sin sangre,
un lago salado
por eso, tú, tu cuerpo de carne
es mi dispositivo para desaparecer,
porque es húmedo
profundo y
eléctrico
y cada vez que follamos
arrojo en ti
mi nombre al vacío
la pesadilla de años
los cristales de mi ausencia
tú no eres cualquiera,
eres mi único azogue posible,
el oráculo que me grita
el cenote de mis ofrendas
mi infierno de flores
el vidrio velado de mis penas
no eres tú lo que deseo en ti,
porque cuando follamos
nuestras caras se funden
en un círculo que no pesa
como párpado de luz
como luz de víscera
como dos espejos enfrentados
dejamos de ser
siendo