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la música asciende a los cielos


una utopía que en su proyecto
no incluye al hombre
1



la música asciende a los cielos, mientras
en la tierra
el hombre se devora a sí mismo en
susurros, como sin querer,
transformando en boca su propia vida,
el rey de la ciénaga es él mismo
tan abrazado a su infierno que
hasta el sapo vive mejor
bajo la rueda del automóvil

cuando en la noche
la música cae al suelo, apenas sin ruido,
solo encuentra pintadas en las paredes y
pegatinas en las farolas
          nada refiere a la rosa
ni al verde colorido del crepúsculo,
una inmensa ola de silencio cruza la calle
como nombrando a Nietzsche o Marx
o Leopoldo María
en los colmenas de los colegios y los hogares

una mano de pintura cubre el agujero
que dejó el disparo cruel de sus palabras
como un veneno echado al mar
para liquidar los peces abisales,
un mar
    en que solo de noche navega
el hombre abrazado a su cuerpo
bajo un techo de cristal y espuma.

1 de Acerca del proyecto hombre, del libro Heroína, de Leopoldo María Panero.