la ciencia de la palabra
es la misma del espacio huido,
del vacío donde flotan los mártires,
de la red invisible que ensucian los calamares
la palabra es la trampa
es la llave
de la puerta del poema
y su cerradura, y sus dientes afilados
y sus venas
la ciencia de la palabra
es Saturno devorando mis manos,
chupando mis dedos, royendo mis uñas
revelándose en mi impotencia por ser
el lazo que me une a ti
nadie lo ve, ni siquiera mi boca
sabe, qué hay detrás de la palabra,
detrás de su vómito ordenado,
más allá del festín conque mi ego
celebra mi desaparición en ella
la palabra es el orgasmo
colgado en la farola
tras la explosión del coche bomba,
un pixel muerto para mis ojos
que aceptan la mentira y la pasión
qué puede haber más allá
si su expansión no acaba,
qué puede haber, si su laberinto negro
corre paralelo al contorno de mi cuerpo,
si es mi nombre y mi fantasía